En la Paz de Cristo
H. EUSTAQUIO SILVA BERNAL + Bogotá, 22 de mayo de 2016
Sea alabada la muchedumbre de tantos Hermanos Jesuitas que han escrito en la santa penumbra de sus vidas – como la de Jesús de Nazaret – la gran historia de la Salvación encomendada a la Compañía de Jesús. H. Eustaquio Silva, SJ
L
a vida del H. Eustaquio pasó a engrosar la historia de esa “santa penumbra” de la vida de los Hermanos Jesuitas que, en el seguimiento silencioso y discreto del Señor Jesús, enriquecen el carisma de la Compañía de Jesús. Las palabras que encabezan este sencillo homenaje sirven de conclusión a unas Notas autobiográficas, que el H. Eustaquio escribió a lo largo de su vida y que concluyó en 1991. Dejaremos entonces contar al propio Eustaquio algunos apartes de su vida, y luego al P. Silvio Cajiao, SJ referir algunos rasgos de su personalidad. 124
“El pueblo de Floresta (Boyacá) se encuentra en un valle pequeño, fértil y muy bonito, rodeado de cordilleras altas, como el Tibet que se ve de todas partes. El Dungua, que aparece nublado frecuentemente, enmarcan el bello paisaje. […] Rosa Grande localizada donde terminan las estribaciones del Tibet, la cordillera más alta de Floresta, es un rincón hermoso donde llega el caudal de agua para el pueblo; recorre todo el trayecto de la finca para hacer de Rosa Grande un sitio atractivo y tranquilo. En esta finca nací el 29 de mayo de 1923. Se empieza a cosechar alverja, habas, fríjol, papa criolla;