En la Paz de Cristo
P. MANUEL ANTONIO PIÑEROS CÁRDENAS + Medellín, 17 de agosto de 2015
pañaría por 27 años más, antes de reunirse definitivamente con el Señor el 17 de agosto de 2015.
“A
esta altura de mi vida lo que más me interesa y satisface, no es esto o lo otro que haya podido hacer por el Señor, sino lo que Él vive haciendo por mí: que me ama sin fijarse qué tanto lo amo yo a Él. Esto me parece sencillamente maravilloso.” Con estas palabras, Manuel Antonio – “Piñe” como lo llamaban cariñosamente todos sus allegados – celebró agradecido sus cincuenta años de jesuita en noviembre de 1988. Ese mismo amor incondicional del que vivió hasta ese momento lo acom86
En Manta (Cundinamarca) vio la luz Manuel Antonio un siete de febrero de 1923, en el seno de una familia de once hijos y sus padres, don Zabulón Piñeros y doña Amelia Cárdenas. Comenzó su vida de jesuita a la edad de 15 años en el Noviciado de Santa Rosa de Viterbo, el 23 de noviembre de 1938. Hechos sus primeros votos el 8 de diciembre de 1940, avanzó a la etapa del Juniorado, que terminó en 1943. En Chapinero, entre 1945 y 1948, cursó un año de Ciencias y Filosofía. Hizo su magisterio en Santa Rosa de Viterbo y en Pasto en 1949 y 1950. Pasó después a Bogotá para adelantar los estudios teológicos (1951-54) previos a la ordenación sacerdotal, que recibió el 3 de diciembre de 1953. A Santa Rosa volvió en 1955 para llevar a cabo la Tercera Probación, y dos años más tarde, el 15 de agosto, emitió sus últimos votos. Su vida de apóstol tuvo dos períodos claros. El primero abarcó casi veinte años y se desarrolló en El Mortiño, Bogotá y Barranquilla. Durante este tiempo desempeñó oficios que normalmente van moldeando la impronta y el carácter del futuro jesuita